Modifica tus menús para alimentarte rico y saludable también durante el verano.
La temperatura ambiente influye mucho en tu alimentación. No te apetecen los mismos platos en invierno y en verano, no tienes la misma hambre y las necesidades energéticas de tu cuerpo no son iguales que en los meses de mucho frío.
Por ellos debes ser consiente y modificar tus menús, adaptarlos a cada estación y proporcionar a tu cuerpo los nutrientes que necesite en cada circunstancia. Los nutricionistas de Health Keeper by AXA te pueden ayudar si quieres.
Ten en cuenta estos consejos:
- No tomes alimentos muy calientes, pues sudarás más.
- Evita las digestiones pesadas, consumiendo alimentos ligeros y limpios.
- Come cinco veces o más al día, pero menos cantidades.
- Bebe dos litros de agua al día; zumos, limonadas, granizados…para reponer líquidos.
- Ingiere cinco raciones de frutas y verduras. Frutas de temporada con mucha agua (melón, sandía, melocotón, ciruelas, mangos, higos,…), y verduras en ensaladas (tomates, zanahorias, lechuga, calabacín, pepinos, pimientos…) ¡échale imaginación!
- Evita fritos y grasas que ralenticen tu digestión y te hacen sudar.
- Toma leche y derivados desnatados y sopas, batidos y cremas frías. ¡refrescantes!
- Toma helados cremosos o polos de hielo para calmar la sed. Evita los alimentos muy dulces o el chocolate que la incrementan.
- Cena de forma ligera, para que te ayude a conciliar el sueño.
¿Quieres algunos ejemplos?
- Menú 1: El ligerito
Desayuno: Yogur con kiwi y muesli.
Comida: Gazpacho y pechuga de pollo a la plancha con ensalada verde. Una rodaja de sandía.
Cena: Tortilla de champiñones y ensalada de tomate y pepino. Un yogur desnatado.
- Menú 2: El gourmet
Desayuno: Zumo de piña. Café con leche desnatada y tostada de pan integral con queso fresco.
Comida: Ensalada de pasta, con chalotas, pimientos, anchoas, salmón, bonitos y dados de queso. De postre brocheta de frutas, con sandía, melocotón, piña y melón.
Cena: Vichyssoise y pavo a la plancha. De postre un flan.
- Menú 3: El de fiesta
Desayuno: Una rodaja de melón. Un vaso de leche y un bocadillito de jamón y queso.
Comida: Tomates rellenos de atún, arroz blanco, guisantes y salsa ligera de yogur, mayonesa o vinagreta. Fiambre frío de carne. De poste un melocotón.
Cena: Parrillada de vegetales y lenguado al horno. De poste una cuajada.
A media mañana toma algo más de fruta y a media tarde toma un zumo, una fruta, un batido o de vez en cuando un helado. ¡Es verano! 😉
Prueba otras recetas refrescantes, como patatas aliñadas o periñaca, salmorejo, carne mechada, tatar de tomate, crema de puerros, ensalada de garbanzos o alubias, pastel de pescado…. La lista es infinita!!
Recuerda compensar los excesos con ejercicio físico, que te ayudará a pasar el verano de forma ligera y saludable.
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