Tener los músculos flácidos no es sólo una cuestión estética que todos queremos evitar. La flacidez además tiene consecuencias en ligamentos y tendones y puede terminar dañando las articulaciones. Una dieta adecuada es, sin duda, fundamental. Pero una dieta por sí sola, no va a hacer desaparecer la flacidez. El ejercicio físico, aeróbico y de musculación va a ser el arma principal para dar firmeza y tonificar tus brazos.

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¿Por qué aparece la flacidez en los brazos?

Una de las causas que pueden favorecer la pérdida de tono en los músculos de los brazos y aparición de la flacidez es una alimentación inadecuada, pobre en vegetales y frutas, rica en grasas saturadas, azúcares y sal y con un insuficiente aporte de proteínas, tanto de origen animal, como vegetal, que son el alimento de los músculos. Sin olvidar, por supuesto una hidratación correcta, para que evitar el retraso en la renovación celular, en la fijación del colágeno y en la regeneración de las fibras.

Pero sobre todo el gran enemigo de los brazos es, sin duda, el sedentarismo, es decir, la falta de ejercicio, que provoca pérdida de firmeza y de tono muscular. Busca a tu entrenador personal en AXA Health Keeper.

Tanto el sobre peso, como la pérdida excesivamente rápida de peso, a la que no acompañe una rutina de ejercicios que favorezcan la recuperación de la elasticidad de las fibras, son sin duda los factores más relevantes para la flacidez en piernas, glúteos, abdomen, y cómo no brazos (bíceps y tríceps).

Tabla de ejercicios

En AXA Health Keeper te hemos dado muchos ejemplos de rutinas de ejercicios, incluso para realizar sin salir de casa. Toma nota ahora de estos ejercicios concretos para tonificar los brazos.

  1. Flexiones. Las de siempre. Tumbado boca abajo, apoya las manos a la altura de los hombros. Piernas juntas y estiradas. Elévate y aguanta todo el peso del cuerpo, manteniendo la espalda recta. Repite 3 series de 8.
    Mismo ejercicio pero apoyado sobre las rodillas, con las piernas cruzadas. Te estabilizas mejor y no fuerzas los lumbares.flexiones
  1. Boca arriba. Utiliza unas mancuernas de 500 gramos o un kilo.Brazos estirados a la altura del pecho. Lanza alternativamente los brazos hacia atrás hasta casi tocar el suelo y vuelve al centro. Repite 100 veces.
    Ahora lanza los dos brazos al tiempo, atrás, sin llegar a tocar el suelo. 50 veces.
    Brazos en cruz, sin llegar a apoyarlos en el suelo. Haz pequeñas rotaciones en el sitio. Cuenta hasta 100.
  1. De pie. Adelanta una pierna y flexiónala. Apoya el brazo del mismo lado sobre el muslo. El brazo contrario tiene la mancuerna. Flexiona el codo lanzándolo hacia atrás mientras mantienes el resto del cuerpo quieto. Repite 100 veces.
    En la misma posición inicial, lanza el codo hacia atrás y una vez allí estira y flexiona el codo. El brazo no se mueve, sólo el codo. Repite 100 veces.
    De pie con las piernas juntas. Eleva un codo, por encima de la cabeza, y sujétalo con la otra mano. Flexiona y estira sin que el brazo se mueva, sólo el codo.
    De pie, piernas juntas, espalda recta y brazos a lo largo del cuerpo. Eleva los brazos en cruz, hasta la altura de los hombros. Aguanta unos segundos y baja sin llegar a apoyar los brazos sobre el cuerpo. Repite 100 veces.
  1. Sentado. Coloca el trasero al borde del asiento. Brazos a los lados, cogiendo el asiento. Piernas estiradas. Baja el culo sujetándote con los brazos y flexiona y estira los codos. Repite 10 veces, descansa y haz dos series más.

Recuerda además que para evitar la flacidez, debes completar estos ejercicios de musculación en el gimnasio, con deporte aeróbico como running, bicicleta, trekking o natación. Así acelerarás el metabolismo y mejoraras el trabajo cardiovascular.

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